Consejos para un pavo tierno y jugoso

Recibe ayuda para preparar el pavo más sabroso en cada paso del proceso de cocción. Descubre qué hacer y qué no cuando compres, prepares y ases tu pavo.

Pavo rebanado con hierbas de olor y tomates en la rama.

Cómpralo fresco

Usa un pavo fresco en vez de uno congelado, ya que los cristales de hielo pueden dañar la carne y fomentar la pérdida de humedad mientras se asa.

Un pavo entero en una bandeja con verduras frescas, una pera entera y ramitas de romero.

No lo ates (las patas del pavo)

Amarrar bien las patas contra los costados del pavo hará que tarde más en asarse, haciendo que no se cueza en forma pareja y la pechuga se seque.

Un pavo entero en una bandeja rodeado de rebanadas de naranja.

Deja que repose

Deja que el pavo repose (cubierto) durante 20 minutos antes de cortarlo. Esto sellará los jugos en la carne.

Salmuera de agua y sal con cáscara de naranja y romero.

Marínalo en la noche

Sumerge el pavo en una salmuera sazonada de sal y agua durante la noche. Solo llena un contenedor grande con agua, cubitos MAGGI o sal y hierbas de olor frescas, y sumerge el pavo.

Pavo rebanado con manojos de romero.

Ásalo boca abajo

Asa el pavo primero con la pechuga hacia abajo. Esto le permitirá impregnarse bien sin tener que abrir la puerta del horno, lo cual hace que se pierda el valioso calor.